Nunca me gustó la adaptación de Tim Burton de Charlie and the Chocolate Factory. Es por eso que una nueva película basada en otra querida novela infantil, y no tanto, no me daba demasiada confianza. Pero lejos estaba de saber que el guión de esta nueva Alice iba a ser semejante estafa.
La guionista de Disney, Linda Woolverton, tomó de manera descarada personajes muy conocidos popularmente, con lo que se ahorró el tiempo que lleva crear unos nuevos, y escribió una historia sumamente insípida, simple y lineal: todo lo contrario de las dos novelas de Lewis Carroll. No existe un momento en toda la película en la que se evoque alguno de los exquisitos diálogos escritos por Carroll. No existe la mínima conexión entre la obra de éste con la película de Burton, con la excepción de algunos "guiños" que no afectan en nada a la globalidad de la historia, como el juego de croquet.
Por otro lado, esta nueva aventura de Alicia se parece muchísimo más a The Lion, The Witch and the Wardrobe, lo que me hace pensar si la guionista no se equivocó de Lewis. Incluso el personaje de la ratoncita se parece muchísimo más a un personaje de The Chronicles of Narnia, el ratón Rípichip, que al ratón que se duerme todo el tiempo en la fiesta del té en la Alicia original.
Por último, la escena de la batalla final, parece un rip-off de The Lord of the Rings de Peter Jackson con algunos toques estéticos cortesía de las figuras de McFarlane.
El gato de Cheshire y la Reina Roja son los personajes más destacables, el primero por haber sido siempre uno de los más queridos y, además, el más logrado visualmente; la segunda, por la interpretación de Helena Bonham Carter.
Alice in Wonderland puede resultar una película atractiva estéticamente, pero hay que preguntarse si realmente mantiene algo de la esencia de la historia original.
Nota: Asombroso el parecido de Johnny Depp como el Sombrerero Loco con Elijah Wood.
1 comentario:
Ay!, pero que bien escibís *se siente seducido intelectualmente* :P.
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